Vecinos de Villa Marina y El Progreso de Anahuac, denuncian contaminación auditiva y ambiental por parte de astilleros del sector.

  • Sabemos que COMAPSA (Astilleros Vergara) son los únicos que tendrían autorización para hacer este tipo de faenas. Hay que señalar que no sabemos si efectivamente se ha hecho un estudio de impacto ambiental. Lo que dicen ellos es que no contaminan, además de un informe que hizo el departamento de Medio Ambiente, que dicen que no producen altos decibeles. Pero yo te digo que un esmeril, que produce 110 decibeles; imagínate 20 de esas máquinas trabajando al mismo tiempo, donde no existe ningún tipo de aislación. Todo eso a un lado de una casa donde residen familias”, explicó Diego Castillo, vecino de Villa Marina.

Motivados por las acciones realizadas por los vecinos del sector Senda Sur, de Alerce, quienes salieron a las calles a reclamar la falta de compromiso que han mostrado las autoridades en cuanto a la conectividad y habitabilidad, pobladores de villa Marina, ubicada en el sector de Anahuac, salieron a denunciar una serie de irregularidades que llevan suscitándose poco más de 15 años. Los ruidos molestos y la contaminación ambiental del sector, ha sido el tenor de sus preocupaciones.

Como lo comentara Diego Castillo, quien es socio de la junta vecinal y ex funcionario de la armada de Chile, esta situación viene afectando la vida normal de los habitantes de esta zona residencial. Los ruidos, que provienen de los diferentes astilleros que funcionan en el sector, – y como lo comentó Castillo- no están de manera legal, en tanto se trata de una zona RESIDENCIAL.

“La problemática que tenemos es que los ruidos molestos generados por el trabajo en los astilleros. Están sobre los decibeles permitidos. Además, tenemos contaminación ambiental. El suelo marino, el cual en este momento está completamente muerto”, detalló Castillo.

Zona residencial

Junto con esto, el socio de la junta vecinal de Villa Marina, explicó que indagaron cómo habían sido otorgados los permisos de funcionamiento de dichos astilleros. “Según el plano regulador vigente, esta zona está calificada como suelo R4 ESPECIAL. Lo que significa que aquí sólo se puede habitar y hacer extracción de peces y mariscos de forma artesanal”

Castillo señaló que en este momento son 6 los astilleros que funcionan en el sector de villa Marina. Pero se tiene conocimiento de solo uno de ellos funciona de manera formal.

“Sabemos que COMAPSA (Astilleros Vergara) son los únicos que tendrían autorización para hacer este tipo de faenas. Hay que señalar que no sabemos si efectivamente se ha hecho un estudio de impacto ambiental. Lo que dicen ellos es que no contaminan, además de un informe que hizo el departamento de Medio Ambiente, que dice que no producen altos decibeles. Pero yo te digo que un esmeril, que produce 110 decibeles; imagínate 20 de esas máquinas trabajando al mismo tiempo, donde no existe ningún tipo de aislación. Todo eso a un lado de una casa donde residen familias”, explicó Diego Castillo.

Denuncias

El vecino de Villa Marina especificó que los ruidos son constantes, impidiendo llevar una vida normal. Comentó que han realizado una serie de reclamaciones, las cuales no han tenido ninguna respuesta por parte de las autoridades competentes.

“Por lo que tengo entendido, los vecinos llevan años presentando este tipo de reclamos y no ha pasado nada. Yo presente hace un año una denuncia a la Superintendencia de Medio Ambiente, el cual en todo este tiempo ni siquiera me ha avisado que ha sido recepcionada la denuncia”, comentó Castillo.

Por lo que informó el vecino de Villa Marina, sólo el departamento de medio ambiente del municipio de Puerto Montt acogió su denuncia y realizó un estudio la cual fue acogida por la Superintendencia.

Castillo contó que también acudieron a la armada, los que llegaron al sector, pero rápidamente se desentendieron del asunto aludiendo que ellos no eran responsables de esta situación.

Villa El Progreso

A esta denuncia, se suma la realizada por los vecinos de Villa el Progreso, situada en el borde costero que está frente a la isla Tenglo.

Luis Gallardo Kochifas, socio de la junta vecinal y poblador de este villorrio acusó a la empresa TRANSMARCO, perteneciente al empresario local, Constantino Kochifas, de no respetar los horarios establecidos para las faenas.

Junto con esto, Gallardo Kochifas comentó que el empresario marítimo habría solicitado una concesión marítima para construir un mirador para la comunidad que se asentaba en aquel lugar. Compromiso que nunca se llevó a efecto, construyéndose un astillero, que funciona hasta el día de hoy.

 “En la declaración de impacto ambiental, hecha en el 2014, y que supuestamente realizó la empresa, dijeron que el material particulado no llegaría a más de 20 metros, los ruidos no superarían los 70 decibeles, y el trabajo solo se realizaría en los horarios establecidos, de lunes a viernes. Esto no es efectivo, ya que los incumple el astillero Scorpios”, especificó Gallardo.

Sector Anahuac

Luis Gallardo agregó que han intentado comunicarle esta situación a la empresa TRANSMARCO, lo cual ha sido infructuoso, por lo que están decididos a continuar con esta reclamación a las autoridades pertinentes. “Las veces que hemos pedido a los trabajadores de los astilleros que cesen sus faenas por ser tarde, ellos nos han respondido que no tienen la potestad para poder hacerlo. Es por esto que nosotros nos vemos en la necesidad de llevar a la opinión pública esta situación, ya que no nos han querido escuchar por la Buena”.

El socio de la junta de vecinos de Villa El Progreso comentó que esta situación ha generado, además, la proliferación de gaviotas y ratones, que llegan hasta el lugar por el alimento que es guardado por esta empresa.

Junta vecinal

El presidente de la junta de vecinos de estas dos poblaciones (ya que conformaron una sola junta vecinal), Juan Mayorga, detalló que buscan reunirse con las autoridades pertinentes y avanzar hacia una solución para este importante sector residencial.

“El borde costero de esta zona está plagado de embarcaciones, las que botan el aceite de sus motores viejos en el agua. A esto hay que sumarle el hecho de que los vehículos deben ser tapados constantemente por el ´areneo´ que se realiza a los barcos para sacarles el óxido. Esto hace que quede una especie de nube de polvo que queda en el lugar. Lo más problemático de esto es que los autos se hechan a perder, además de que estamos respirando ese material particulado”, se refirió Mayorga.

El presidente de la junta vecinal acotó que muchos vecinos han sufrido enfermedades, pero no se sabe si esto ha sido causa del material particulado; desechos que son “pan” de todos los días.

Frente a las quejas que han manifestado los pobladores de este sector, las empresas – según lo comentado por el presidente de la junta vecinal- han respondido que se harán cargo. Cuestión que se ha dilatado por varios años. Mayorga apuntó que han puesto algunas mayas para que el material Particulado que sale de la limpieza de las embarcaciones no se expanda hasta las casas de los vecinos, pero eso ha sido insuficiente.

Hasta el momento sólo se han recepcionados los reclamos por parte de los vecinos, y las autoridades no han dado respuesta a estos requerimientos. Tal como señalaron los vecinos de este sector de Puerto Montt, están agotados y muchos de ellos enfermos por los constantes ruidos y la contaminación de los desechos industriales en el suelo marino y en la playa.

Por: Daniel Carrasco