Se toman sede de la CONADI a seis años de la muerte de Macarena Valdés

El día de ayer se cumplieron seis años desde que Macarena Valdés, mujer mapuche, madre de cuatro hijos y férrea defensora del medio ambiente, fue encontrada muerta en su hogar. La activista vivía junto a su compañero, el werkén Rubén Collío, y su familia en el sector Tranguil, de la comuna de Panguipulli.

Una primera autopsia del Servicio Médico Legal indicó que su muerte se trató de un suicidio, sin embargo desde entonces, la familia encargó una segunda autopsia que desmentiría aquello. En todos estos años, el círculo de Macarena ha insistido en esclarecer lo ocurrido, convencidos de la participación de terceros.

Esta lucha ha despertado un fuerte apoyo en el mundo del activismo y las organizaciones sociales. Prueba de ello es que en la conmemoración de la muerte de Macarena, diversas organizaciones se tomaron una sede de CONADI en protesta por la impunidad.

El legado de Macarena

En una declaración pública, las organizaciones expresaron que “el rostro de Macarena ha estado con nosotres desde 2016 cuando revelábamos el femicidio empresarial que le quitó la vida. En la Revuelta Popular su lucha nos acompañó en cada caminata, acción y encuentro que hicimos. Sabemos que la violencia estructural por medio de instituciones públicas y privadas, persigue a las defensoras y llegan hasta el femicidio empresarial”.

Críticas a CONADI

La declaración agrega respecto a la CONADI que el organismo “propagandiza planes y mesas para apoyar a las comunidades. Sin embargo, los embalses no cesan, los proyectos hidroeléctricos están en pie, las forestales avanzan y la gente mapuche es desplazada, criminalizada, secuestrada y asesinada por habitar su territorio”.

“A la Negra la mataron”

“A la Negra la mataron” es la frase que se ha popularizado para denunciar la falta de justicia para Macarena. Diversos factores han provocado que la muerte de la mujer de 32 años, que sus cercanos llamaban cariñosamente “La Negra”, aún se encuentre en investigación en la Justicia. En una primera querella criminal que interpuso su cónyuge, Ruben Collío, hoy fallecido, relata algunos de los hechos que los llevan a esa convicción.

Proyecto de hidroeléctrica

Fue en el año 2012 cuando el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) aprobó el proyecto para una minicentral hidroeléctrica en el sector de Tranguil, proyecto de la empresa RP Global (hoy llamada RP Aroyo).

Los vecinos del sector, organizados en la comunidad Newen Tranquil se opusieron al proyecto, con Macarena y Rubén como sus principales líderes. Tal como relató el cónyuge de Macarena en la querella, “el desarrollo de distintas actividades en defensa del Río Tranguil, significó que nuestra familia recibiera una serie de amenazas”.

Amenazas

En particular, agrega, “el día 21 de agosto del 2016, doña Mónica Paillamilla -quien es dueña del terreno donde nuestra familia reside- recibió la visita de dos subcontratistas de RP Global. Quienes luego de solicitar nuestra salida del terreno, advirtiendo que si no nos expulsaban de ese lugar, había gente joven que quería “hacernos daño”.

Precisamente al día siguiente, Rubén añade que “ encuentro a mi mujer fallecida en extrañas circunstancias. Su cuerpo yacía en el suelo de la pieza de nuestro hijo mayor, siendo encontrada por nuestro hijo de 11 años. Quien la encontró colgando de una viga de nuestra casa, en su desesperación, corto la cuerda y la trato de reanimar sin éxito. Hasta ahora no existe ningún indicio que dé cuenta de su voluntad de cesar con su vida”.

Al día siguiente

En cuanto al proyecto de RP Global, la pareja se oponía en particular al tendido eléctrico de alta tensión que se proyectaba pasaría por sobre su hogar. El activista relata que “el día 23 de agosto de 2016, a primera hora de la mañana, mientras yo me dirigía a Valdivia a retirar el cuerpo de mi mujer, se presentan alrededor de 25 operarios de la empresa SAESA, a realizar el cuestionado cambio de cables y montar su controvertida línea de alta tensión, custodiados y orquestados por carabineros de Liquiñe”.

Añade que los funcionarios policiales “estaban al tanto de la situación de duelo que vivíamos. Ya que fueron ellos mismo los que el día anterior tomaron el procedimiento de levantar el cuerpo de mi fallecida mujer”.

Familia continúa buscando justicia

Rubén Collío falleció este año sin saber lo que ocurrió realmente con Macarena. Sin embargo, su hijo Alexis Collío Valdés ha continuado la búsqueda de justicia. El 3 de agosto de este año, el joven presentó una querella criminal en contra de quienes resulten responsables, como autores, cómplices o encubridores, del crimen contra su madre.

En ella plantea que según la exhumación del cuerpo y segunda autopsia solicitada por la familia, “resulta evidente la intervención de terceros en su lamentable deceso”. Por otro lado, agrega que “es un hecho que actualmente el porcentaje de asesinatos en contra de quienes se oponen a proyectos de inversión en distintos territorios de América del Sur es de los mas altos del mundo”.

Por ello, el hijo de la activista hace hincapié en “la obligación del Estado de llevar a cabo una investigación racional y justa y otorgar así el acceso a justicia respecto de las víctimas”.

Redacción: Manuela Barrueto

Fotografías: Circulo Maria Loreto Castillo – Justicia para Macarena Valdés