Tren de Aragua: En Puerto Montt reformalizarán a involucrados en trata de personas tras encontrar nuevas víctimas

Fiscalía de Puerto Montt pedirá la reformalización de cinco ciudadanos extranjeros involucrados en una red de trata de personas con fines de explotación sexual.

Actualmente los sospechosos se encuentran en prisión preventiva, luego de que se los formalizara a fines de marzo. Los sujetos pertenecerían al Tren de Aragua, red delictual que se dedicaba a ingresar a mujeres por pasos no habilitados al país. Luego, su modus operandi era trasladarlas al sur del país, para ahí obligarlas a ejercer la prostitución.

Ampliarán querella

El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) actúa como querellante en esta causa. La entidad pedirá al Juzgado de Garantía de Puerto Montt la ampliación de su querella para incluir a las nuevas víctimas que incorporará la Fiscalía en su reformalización.

Las nuevas víctimas —entre seis y ocho mujeres— se sumarán así a las ya consideradas en la querella del INDH, que menciona a seis personas (de 18 a 25 años de edad). Los delincuentes obligaban a las víctimas a prostituirse bajo las condiciones impuestas por la red entre septiembre y noviembre de 2021.

“Debe erradicarse”

El jefe regional de Los Lagos del INDH, Mauricio Maya, señaló que “consideramos que la trata de personas es un delito muy grave que atenta contra la integridad física y síquica, y la dignidad de las personas. Es lo más cercano a una forma de esclavitud moderna y debe erradicarse, para eso actuamos como Instituto”, dijo.

De acuerdo con la indagación del Ministerio Público, desde agosto del 2021 hasta marzo pasado, cuando se registraron las detenciones, los integrantes de la red cumplían roles para perpetrar el delito de trata de personas con fines de explotación sexual. Así obtuvieron importantes ganancias desde su centro de operaciones ubicado en Puerto Montt.

El modus operandi de la organización consiste en captar jóvenes venezolanas dentro de Chile, Colombia y/o Venezuela. Para acceder a ellas, se les ofrecía acogida en el país, para luego cobrarles por ingresarlas clandestinamente y explotarlas sexualmente. Con este cometido, se restringió su libertad de diversas formas.