Investigadores de la Universidad de Los Lagos y la Universidad de Chile estuvieron en el encuentro

Estudio reveló que el desempleo y la incertidumbre económica son las preocupaciones más importantes de los puertomontinos en tiempos de pandemia

En lo positivo resalta el sentimiento de solidaridad y comunidad surgido en los sectores más vulnerables de la población.

Los resultados fueron dados a conocer en el marco del Coloquio “Efectos de la Pandemia en la vida de los habitantes de Puerto Montt”. Actividad impulsado por el Centro de Estudios del Desarrollo Regional y Políticas Públicas (CEDER) de la Universidad de Los Lagos. La actividad se desarrolló en el marco del Ciclo de Conversatorios entre representantes de la academia, sociedad civil, y sector público. En la ocasión participaron académicos, investigadores y representantes sindicales y de organizaciones sociales de Puerto Montt.

La investigación reveló que los efectos de la pandemia en la vida cotidiana son más intensos que los experimentados en el estallido social. Esto debido a las sensaciones de incertidumbre. Miedo ante un futuro incierto, a los focos de delincuencia que han surgido en los barrios y al desempleo en la población.

El coloquio contó con las exposiciones de Oscar Mac Clure, Sociólogo, Universidad de Los Lagos, Emmanuel Bazoret, Socióloga, Universidad de Chile, Hernán Navarro, Presidente de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Puerto Montt, Pamela Espinoza, Presidenta Regional de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), Región de Los Lagos y Marcel Théza, profesor Universidad de Los Lagos en su calidad de moderador.

Principales resultados del estudio

Entre los resultados de la investigación, realizada en las ciudades de Puerto Montt y Santiago, se contaba el miedo al desempleo. La incertidumbre económica son algunos de los temores que enfrenta la población. La única certeza que se tiene es que al término de esta crisis se va a dar una profundización en los problemas económicos. En los sectores más vulnerables de la población.

En el plano de las emociones el estudio muestra que una de las situaciones más preocupantes es la sensación de miedo ante un futuro incierto. No sólo al plano de la salud, sino en el aspecto de la subsistencia. El hambre se plantea como una amenaza contante para un sector de la población. “Para un trabajador el temor más grande, es que pasará si se enferma. Que sucederá como su familia en ese caso” planteó Oscar Mac Clure, Investigador de la Universidad de Los Lagos.

En lo positivo, destaca el sentimiento de Identidad surgido en los barrios en el periodo de pandemia. La solidaridad y la idea de comunidad, de intercambio y del trueque han surgido como una alternativa para sobrellevar los efectos. Una solidaridad práctica que se origina desde abajo, de cuidarnos entre todos, que surge como una ideología del cuidado, del día a día, explicó.

Plantea, que la crisis social por la pandemia ha provocado que las personas realicen cambios en sus métodos de trabajo. Busquen alternativas de empleo y se reinventen con emprendimientos de diversa índole. “El reinventarse no es algo soñado. No todos pueden hacer pan, no todos pueden hacer comida. Siempre reinventarse, es hacerlo a un empleo que siempre es más precario del que teníamos antes de la crisis del coronavirus”, explicó el Mac Clure.

Sectores Inmunes a la crisis económica

Para la socióloga Emmanuel Bazoret, el estudio reveló que hay sectores de Santiago, Puerto Montt y Puerto Varas que han sido inmunes a la crisis económica producida por el coronavirus. Grupos que la pandemia no los ha afectado e incluso se han beneficiado con ella. Sin embargo, puntualizó que hay otros sectores, que luego del estallido social han quedado muy resentidos. Con la pandemia han llegado a una situación compleja de sobrevivencia.

La investigadora señala que en ambas ciudades existe un sentimiento de volver a las calles. A lo que fue el estallido, luego de pasada la pandemia. Se recalca que con la pandemia quedaron muchos temas inconclusos y pendientes. Además se desnudó la precariedad que viven los sectores más vulnerables de la población.

Entre los sectores más afectados por la pandemia, la investigación destaca a los adultos mayores, a los jóvenes que se han visto impedidos de dar continuidad a sus estudios y a las mujeres. No sólo en el plano laboral sino en el mental por la sobrecarga que han experimentado en la organización de las labores del hogar.

En este sentido, explica Basoret, uno de los aspectos más relevantes en materia de mujeres, ha sido el repliegue de estas al hogar. Lo anterior se debe principalmente a que han sido las primeras en perder el empleo “además se suma el factor que el 50 por ciento de las mujeres en el país no están formalmente en el marcado laboral”, explicó.

Abandono del Estado

Para la Presidenta de la ANEF Los Lagos, Pamela Espinoza, la sensación de abandono por parte del Estado ha sido uno de las sensaciones más recurrentes en la población en el periodo de la pandemia y de la crisis social surgida en barrios y en poblaciones de la ciudad.

En ese sentido, explicó que, como funcionarios de las instituciones del Estado, les ha llamado la atención los pasos que ha ido dando el Gobierno para superar la crisis sanitaria. Primero, en los que se refiere al manejo de las cifras de los contagiados y muertes por la pandemia. Contrasta lo que plantea el gobierno y lo dicho por los gremios y las organizaciones que trabajan en el sector de la salud.

Para nosotros es una real amenaza y resulta complejo, manifestó la dirigenta, lo anunciado por el Ministerio de Hacienda. La innovación en materia del presupuesto base cero, lo cual significa que entran en evaluación todos los programas de orden social, puede resultar una realidad dificil. “Con ello, sentimos que la ciudadanía puede volver a ser golpeada con la disminución de los espacios donde se podían eliminar algunos obstáculos de los derechos de las personas”, explicó Espinoza.

“Frente al último anunció de protección a la clase media, nosotros hemos sido enfáticos en decir que la protección social actualmente en nuestro país está siendo disfrazada de créditos, de endeudamiento de las personas. Actualmente 11 millones de personas están endeudadas y más de 5 millones están en la condición de morosas”, manifestó la dirigenta en su exposición.

Afirmó, además que como ANEF han visto que la política pública del Gobierno de Sebastián Piñera se aleja de uno de los elementos esenciales del Estado, que es la protección de los derechos de las personas. “Vemos que la tarea y objetivo que tenía el Estado de protección de los derechos se va transformando en una situación de crédito, más que garantía de derecho para las personas”.

En materia de los derechos de las mujeres, la representante de los funcionarios públicos, explicó que la pandemia ha dejado ver la violencia en contra de las mujeres. Las cifras actuales muestran que el confinamiento ha producido un recrudecimiento de la violencia al interior de los hogares.

Cesantía y pobreza

Henan Navarro, presidente de la Unión Comunal de las Juntas de Vecinos de Puerto Montt, manifestó que como dirigentes sociales han analizado dos momentos fundamentales y ad portas de un tercero. El primer momento fue el de contención, de disciplinamiento acerca de las medidas sanitarias. Donde los adultos mayores han sido uno de los grupos más afectados.

Un segundo escenario se da en junio, en el cual se palpa la cesantía y la pobreza en la población. Donde surge en las organizaciones vecinales una actitud solidaria, que ha sido fundamental y que se ha expresado con pequeños gestos entre los vecinos. Ollas comunes y recolección de alimentos para los adultos mayores.

El tercer momento, explicó el dirigente vecinal, tiene que ver con que más allá de la distribución de las cajas de alimentos lo que requerimos en los barrios es empleo y empleo digno. Allí es el Estado y la empresa privada quienes tienen la palabra. En ese sentido, es enfático en resaltar que los fundamental para ir solucionando los problemas socioeconómicos de la población es la creación de empleo. Las medidas asistenciales son sólo un paliativo.

Asimismo, afirmó que una de las situaciones más críticas que se están viviendo al interior de los barrios y poblaciones es el endeudamiento por los servicios básicos. “Los elevados cobros que hicieron las empresas de distribución eléctrica en el mes de mayo, cuando no tomaron lectura presencial, hicieron que las cuentas estuvieran extremadamente altas. Además, que en ese mismo mes la empresa de agua potable, ESSAL, subió sus tarifas en un 3,4 por ciento”, explicó Navarro.

“Hay morosos en la región que están en la etapa terminal. Antes de la pandemia había un promedio de 600 mil y 700 mil personas en la condición de morosos. Ya estaban amenazadas con el embargo de sus pertenencias. Ese número hoy sobrepasa el millón de personas”, afirmó el dirigente vecinal.

Con respecto a la distribución de las cajas de alimentos que se han entregado en los diversos barrios de Puerto Montt, el dirigente señaló que el Gobierno Regional debe hacerse responsable con lo comprometido y con la realidad de la población, “no puede ser que existan más de 50 mil familias en la condición de la pobreza, y repartan 20 mil cajas. Aquí las autoridades deben cumplir su palabra”, finalizó Navarro.