Justicia niega instalación de dos centros de cultivo de salmones en Reserva Nacional Kawésqar

El tercer Tribunal Ambiental emitió una sentencia que deja sin efecto dos resoluciones de calificación ambiental (RCA) de la empresa Nova Austral, la que pretendía instalar dos centros de cultivo de salmones en las aguas de la Reserva Nacional Kawésqar, región de Magallanes.

En especifico, el fallo apunta a que si bien ambos centros fueron presentados de forma fraccionada, en la realidad, conforman un mismo proyecto y tienen áreas de influenza en común. En este sentido, por lo tanto, su impacto ambiental debe ser evaluado en conjunto de forma de sopesar el real alcance que podrían tener, y los efectos sinérgicos que podrían generar en la fauna marina, y el valor turístico y paisajístico de este lugar.

Las comunidades Kawésqar y los habitantes de la región de Magallanes, junto con las organizaciones Greenpeace, AIDA y ONG FIMA, impulsaron una campaña para visibilizar los efectos que estas instalaciones podrían tener en el entorno.

“Puntapié inicial”

En este sentido, Macarena Martinic, abogada de ONG FIMA, explicó sus deseos de que esto “pueda ser un puntapié inicial para la prohibición de la salmonicultura debido a la incompatibilidad de la actividad con la Reserva Nacional Kawésqar”.

Por su parte, Leticia Caro, representante de los Grupos Familiares Nómades del Mar, expresó que “la invalidación de estos permisos no hace más que demostrar que lo que decimos es real, que nuestro territorio no es compatible ni lo será con la industria Salmonera y que nuestros antiguos hoy nos ven desde las memorias del territorio.”

Es realmente insólito que empresas que están hoy enfrentando incluso juicios por demanda ambiental por el propio Consejo de Defensa del Estado producto de un historial de malas prácticas y que ya tienen comprobados efectos en los fondos marinos en parques nacionales como NOVA AUSTRAL, busque hoy casi como un premio instalarse en estas aguas puras y sanas. Anularle estos permisos es una importante victoria del trabajo conjunto con comunidades, pero también un llamado de atención para que de una buena vez las autoridades eviten esta invasión en los fiordos patagónicos de nuestro país” señaló Matías Asún, director nacional de Greenpeace.