Valeria Argel, dirigenta vecinal: “Las necesidades de las personas siempre son lo principal”

  • Se acerca el 8 de marzo, fecha en que conmemoramos el Día Internacional de la Mujer. Por eso, y en forma de homenaje a la mujer trabajadora, Diario El Aijtador conversó con diversas mujeres que inspiran en nuestra región.

Valeria Argel Mansilla tiene 51 años y es nacida y criada en Pelluco, Puerto Montt. La dirigenta forma parte de la Junta de Vecinos Nº 19 Balneario Pelluco desde hace casi 20 años, y la preside desde el 2006.

La dirigenta social cuenta que llegó a este espacio “casi de casualidad”. Ya que en esos tiempos la Junta de Vecinos de Pelluco se encontraba en renovación. Invitaron a su madre a participar, ” ella no encontró nada más entretenido que inscribirme a mi”

“Fui por hacerle caso, pero también había cierto bichito de curiosidad en mi por saber como funcionaban las juntas de vecinos”, relata. Se postuló, a sus 33 años, y obtuvo un cargo poco importante.

En un comienzo la labor fue difícil, la dirigenta comenzó a investigar, aprender y realizar diferentes acciones. La dirigenta relata que “había tantas cosas por hacer, y veíamos que todo avanzaba tan lentamente, o todos los recursos se iban a un sector y no para otros”.

Se enfrentó al machismo de la época

Pero Valeria recuerda que cada vez que intentaba llevar a cabo algo se generaba conflicto con los antiguos dirigentes. “Ellos eran de la vieja escuela. Me decían que incumplía los estatutos y siempre me estaban pisoteando. También me decían que era mujer y otras excusas”.

Asimismo, la dirigenta recuerda también haber sentido el machismo de las autoridades del momento. Pero agrega “yo siempre he sido chora. Siempre he sido de personalidad fuerte. No me achico ante nadie, pero dentro del respeto siempre”.

Pasado un tiempo, la mujer cuenta que “comenzó a sentir que tenía la posibilidad de mostrar más capacidades”. Ahí, el año 2006 fue electa presidenta. La labor, asegura, ciertamente no ha sido fácil. “Nosotros aquí trabajamos sin recursos. Porque nosotros no cobramos cuota social, ya que al final es tan poca la gente que participa que es injusto que paguen unos pocos para el beneficio de todos”, señala.

La importancia de pensar en comunidad

Sin embargo, la dirigenta aclara que su visión como líder vecinal, siempre ha sido el fomento y la preocupación por la vida en comunidad. “Yo siempre he dicho, si hay un alumbrado apagado, no afecta solamente al socio, al vecino, o al dirigente, afecta a todos. Al no socio, al residente, al visitante y hasta al vagabundo”, ejemplifica. Sobre lo mismo, la mujer agrega que otro compromiso que se asume cuando eres dirigente de un sector es ser un apoyo para quienes tienen menos o están pasando momentos difíciles.

Por otro lado, respecto a su labor, la presidenta vecinal asegura que se siente satisfecha de que se han logrado cosas. “El barrio ha cambiado desde que llegó a mis manos como presidenta. Eso no se ha hecho gratuitamente, ha tenido un costo de trabajo, de tiempo, emocional. De buscar la forma de poder ir avanzando, y aún faltan muchas cosas por hacer”.

“Las necesidades de las personas siempre son lo principal”

Para la dirigenta, uno de los aspectos más sorprendentes de ser presidenta de la junta de vecinos es el descubrimiento de los diferentes problemas que aquejan a los vecinos. Ya que por el puesto que ocupa, muchas personas acuden a contarle los problemas de todo tipo que los aquejan. “Te enteras de las cosas más insólitas a lo impensable. La gente confía y viene a pedir ayuda, por temas como violencia intrafamiliar, abuso. Acuden a uno por cosas insólitas, pero para los vecinos es muy importante que una los escuche”, asegura.

Es en ese vínculo y cercanía con los vecinos que la dirigenta ha encontrado el mayor sentido a su cargo. “Por ejemplo, los vecinos de de Pelluco Alto Norte, esa gente jamás había sido visitada por los antiguos dirigentes. Y que tu los vayas a visitar, o les vayas a preguntar que necesitan, como están los caminos y si les está llegando bien el agua. Son pequeños detalles, y la gente se siente bien, se siente importante, escuchada. Entonces, las necesidades de las personas siempre son lo principal”.

Suplementera

Otra faceta de esta dirigenta tiene que ver con el rubro al que se dedica, ya que además, es presidenta del sindicato suplementero N°2 de Puerto Montt. “Es un gremio que tiene luces de desaparecer pero ahí estamos nosotros dando la lucha. Es un trabajo totalmente independiente y a pulso, porque nosotros como suplementeros somos invisibles ante la autoridad. A pesar de que somos parte del patrimonio de Chile, no tenemos ningún tipo de ayuda, nada”, relata

Sin embargo, la dirigenta relata que es un trabajo muy entretenido. Incluso, cuenta que en noviembre asistió a un congreso nacional del gremio. ” Conocimos gente desde Arica a Tierra del Fuego, y todas las vivencias son distintas”.

Redacción: Manuela Barrueto